Una semana más continuamos con nuestro recorrido por el gigante asiático. Esta semana os hablamos de Fenghuang, una caótica, pero al mismo tiempo cautivadora ciudad que no ha de faltar en vuestro itinerario.
La mejor manera de conocer el casco histórico de esta singular ciudad, popularmente conocida como la «Venecia asiática», es dejarse perder por sus calles y, por supuesto hacer noche. La iluminación y ambiente callejero, os aseguramos que no os dejara indiferentes.
Cómo llegar desde Zhangjiajie
En autobús desde la propia estación de buses de Zhangjiajie a las 8:30h
- Trayecto: 4h
- Precio: 80CNY por persona
Alojamiento: Rose Courtyard
1 noche en habitación doble estándar 397.8CNY (aprox. 51€)
Este hotel no fue nuestra primera opción. Pero el que habíamos reservado había olvidado poner nuestras fechas como no disponibles, ya que cerraban por vacaciones (ya veis que los chinos son un poco “olvidadizos”) Menos mal que Booking nos buscó otra alternativa y nos reembolsó la diferencia (20€) tras nuestra estancia (normal que les recomiende, ¿no os parece?)
La habitación y el baño eran amplios y tenían una decoración bonita. La ubicación nos gustó pues estaba a un paso del bullicioso casco antiguo de la ciudad, pero al mismo tiempo en un rincón tranquilo donde no se escuchaba nada.
Pero teniendo en cuenta su elevado precio (probablemente debido a las fechas de nuestra estancia durante la Fiesta Nacional) deberían cuidar más algunos detalles, ya que las sábanas, aunque limpias y suaves, tenían alguna mancha de sangre y había varias manchas de mosquitos por las paredes.
Consejo viajero: nosotros os desaconsejamos alojaros en alguno de los cientos de hoteles ubicados junto al río. Ya que el ruido y las luces nocturnas impedirán vuestro descanso. Así, como ,probablemente, los mosquitos teniendo en cuenta su proximidad al agua.
Qué ver en Fenghuang
Su casco histórico. Fuera de aquí poco o nada os ofrecerá la ciudad. Si bien un tranquilo paseo por la tarde y otro temprano por la mañana siguiente os hará disfrutar, sin duda, del encanto de la misma.
Por supuesto, no debéis perderos la noche. La ciudad se inunda de luces, olores y transeúntes. Un ambiente en ocasiones mareante y agobiante.
Hace unos años para poder visitar la ciudad era necesario adquirir un billete combinado. Actualmente, pasear por sus calles es gratuito, si bien tendréis que pagar de forma individual para acceder aquellos edificios que queráis visitar.
Consejo viajero: En Fenghuang encontraréis cientos de puestos de comida callejero, estilo barbacoa, sobre todo, al caer la noche. Pero, os recomendamos comer en el Miss Yang Restaurant (45 Laoying Shao), y probar su clásico guiso de pollo. Está algo escondido, pero la búsqueda merecerá la pena.
Tras nuestra breve, pero suficiente estancia en Fenghuang tomamos rumbo hacia Guilin y la famosa zona kárstica de Yangshuo y Xingping, donde diremos adiós a la China continental. Pero, todo ésto os lo contamos en el próximo post.
Hasta la próxima semana viajer@s!